Sabías que la Luna, al igual que la Tierra, está animada por dos movimientos: uno, de traslación alrededor de nuestro planeta, y otro de rotación sobre su eje. Dado que
la duración de los dos movimientos es la misma, la Luna nos ofrece siempre la misma cara.
En la práctica, sin embargo, nuestra visión de la Luna sobrepasa un poco al hemisferio, debido a unos balanceos aparentes del satélite conocidos con el nombre de libraciones. Aproximadamente llegamos a ver un 60 % de la superficie lunar
La rotación de la Tierra y la de la Luna guardan una perfecta sincronía, a manera de engranajes, de tal forma que una parte queda oculta.